PRIMERA NOCHE FLAMENCA DEL ÚLTIMO
TRIMESTRE DE 2012
5 de octubre 2012
HOMENAJE A NUESTRO QUERIDO COMPAÑERO CARLOS GARCÍA
DESAPARECIDO RECIENTEMENTE
Fotos: Antonio Bella Barroso
En primer lugar, el Presidente de nuestra Peña, Francisco Catalán, leyó este texto en memoria de nuestro querido y recordado compañero:
El nombre de Carlos García, junto a otros como Pedro
Ceballos, Bartolo Marín o Caroles ya forma parte de la historia de oro de esta
peña.Cada uno supo ocupar su puesto, y el de Carlos nunca fue como la bengala que
arde en mil colores apagándose rápidamente, no,
el fue como esos leños que arden lentamente en la hoguera
proporcionándonos calor durante mucho tiempo.
Siempre discreto, le vimos ocupado en las tareas más
silenciosas e ingratas, a la vez que imprescindibles para la peña, ya sea en la
compras de bebidas y aperitivos para el
bar del local antiguo, en la puerta dirigiendo a los amigos que nos acompañan esporádicamente,
o recaudando las aportaciones de estos. Atendiendo
nuestra página de Internet o preocupándose por los programas, etc.
Igualmente quiero destacar su autoridad moral en todos los ámbitos, incluso
para eso tan difícil como solicitar aportaciones económicas
extraordinarias a los socios cuando la
situación económica no estaba a la altura de la representación artística de la
peña. Los más antiguos lo recordareis.
En una noche como esta no puedo olvidar, una vez más, que
cuando nuestras dificultades llevaron a la peña al borde del cierre y se
decidió aguantar “un poco más”, manteniendo la peña abierta, aunque sin
actuaciones remuneradas, nos reuníamos entorno a una conversación, en el mes de
diciembre, con pocas luces, menos calefacción, los refrescos que cada uno traía
en su gabardina del bar de Miguel y la compañía de algún cantaor con su inseparable
compañera Mercedes, siempre lo recuerdo cuando presentó a Pepe Caballero.
En esas noches pudimos faltar cualquiera, pero Carlos no
faltó ni una sola noche. Eso, amigos, señala el amor que sentía por la Peña
Duende, que salió del bache y de la que hoy nos sentimos orgullosos.
Para preparar este breve homenaje he sondeado a los
amigos que le conocieron de cerca, Molina, Monico, y todos ellos me dicen lo
mismo, Carlos fue un hombre recto, honesto y amigo de sus amigos, esto en los
tiempos que corren es un valor admirable.
Además, debo decir que fue un hombre comprometido en sus
ideas políticas y sociales. Me relataba Ángel García Marinas, que hoy, a su
pesar, por coincidencias de agenda con la de la ONG en la que trabaja, no puede
estar en este acto, que en estos días le recuerda especialmente, pues para él constituyó
un soporte importante en sus labores de
colaboración con los países en desarrollo del sur. (África).
Quiero resaltar que entre los amigos y peñistas tenemos la compañía
de la familia de nuestro amigo Carlos, Seguro que vuestra presencia hoy
aquí le hubiera emocionado como nos emociona a nosotros, muchas, muchísimas gracias.
Yo hoy a Carlos le
quiero imaginar en nuestro cielo, en el de los agnósticos, en una tertulia con
Pedro Ceballos, con Caroles y con Bartolo, con Manuel torre y El Che, con
Fernanda y La Pasionaria, con Camarón y con Chaquetón.
Como no podía ser de otra manera hemos querido que, igual
que su nombre, su imagen perdure entre nosotros, y desde hoy esta foto, tomada en una de esas noches de
peña, en el local antiguo, donde su
expresión ofrece por si misma el estado de ánimo de Carlos en las veladas de
actuación, esta foto, decía, nos
acompañará para siempre en la peña Duende.
Antes de finalizar el acto invito a quien desee a dirigir
unas palabras.
Por último, yo no voy a pedir un minuto de silencio, lo
que os voy a pedir es una ovación de gala para nuestro compañero y amigo
Carlos.
Paco Catalán
Acto seguido, Antonia Malpica, recitó y dedicó el poema " Elegía a Ramón Sijé" de Miguel Hernández, a la memoria de Carlos:
Acto seguido, Antonia Malpica, recitó y dedicó el poema " Elegía a Ramón Sijé" de Miguel Hernández, a la memoria de Carlos:
ELEGIA A RAMÓN SIJÉ
.
(En Orihuela, su pueblo y el mío, se me ha
muerto como del rayo Ramón Sijé, a quien
tanto quería.)
.
Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.
.
Alimentando lluvias, caracolas
Y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
.
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado,
que por doler me duele hasta el aliento.
.
Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.
.
No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.
.
Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
.
Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.
.
No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.
.
En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta
.
Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.
.
Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte
.
Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera
.
de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.
.
Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irá a cada lado
disputando tu novia y las abejas.
.
Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.
.
A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.
.
(1 0 de enero de 1936)
.
(En Orihuela, su pueblo y el mío, se me ha
muerto como del rayo Ramón Sijé, a quien
tanto quería.)
.
Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.
.
Alimentando lluvias, caracolas
Y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
.
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado,
que por doler me duele hasta el aliento.
.
Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.
.
No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.
.
Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
.
Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.
.
No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.
.
En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta
.
Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.
.
Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte
.
Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera
.
de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.
.
Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irá a cada lado
disputando tu novia y las abejas.
.
Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.
.
A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.
.
(1 0 de enero de 1936)
Debo decir que la actuación de Antonia Malpica al recitar el poema de Miguel Hernandez en homenaje a nuestro compañero Carlos fue magnifica, pude ver los ojos vidriosos de algunos asistentes, eso solo se consigue si se pone un gran empeño en la labor y Antonia se lo preparó y ofreció un gran espectaculo.
ResponderEliminarCreo que la peña y los amigos de Carlos estamos en deuda con nuestra amiga.
Paco Catalán